PRESENTACIÓN
Este breviario de literatura con fines pedagógicos recoge un buen número de textos que han sido seleccionados por sus características estéticas y éticas, por su sensibilidad artística, por sus manifestaciones de los sentimientos a través del lenguaje escrito, por su función –a veces- lúdica, por su fantasía, por su calidad poético-emocional y en general por su belleza literaria.
Por otro lado, han sido extraídos de muy diversos manuales de texto (desde los años sesenta a la actualidad y de las más variadas modalidades del sistema educativo español) y de libros de lectura universal. Además, debo anotar que, aquellos que carecen de autor, han sido sacados de internet, periódicos, revistas...
Por último, en cuanto a las ilustraciones, decir que aunque me gustaría que, en su gran mayoría, los textos llevasen la fotografía de su autor o alguna imagen relacionada con su contenido, no lo he podido llevar a cabo, por no contar con los medios adecuados para ello.
La experiencia ha sido llevada a cabo a lo largo de varios cursos escolares, en un grupo de alumnas de Formación Básica de Educación de Adultos. Sin embargo su contenido puede ser expuesto en cualquier nivel educativo, adaptándolo a la metodología correspondiente y seleccionándolo según la edad del alumno.
Consiste su objetivo principal en que el alumno aprenda a descifrar con exactitud y rigurosidad el contenido semántico que encierra un texto literario y que a partir de su entrenamiento cotidiano a lo largo del curso, pueda comprender con más propiedad y precisión todos aquellos mensajes que puedan llegarle a través de los medios de comunicación habituales.
Sin embargo, otros objetivos didácticos que podemos alcanzar de forma simultánea y complementaria al anterior, podrían ser:
· Enriquecimiento de la comprensión y expresión oral y escrita, y en consecuencia ampliación de su reducido vocabulario.
· Educar su sentido estético, fomentando el gusto por la lectura y favoreciendo el desarrollo de la creatividad y la fantasía.
· Contribuir a ejercitar la memoria y la imaginación.
· Impulsar pautas de comportamiento que faciliten el diálogo.
· Adquirir nuevos conocimientos.
· Desarrollar capacidades que posibiliten el ejercicio de la lectura en voz alta en público.
· Mejorar la pronunciación: entonación, ritmo, timbre de voz...
· Expresar de forma organizada hechos, sentimientos, experiencias y conocimientos personales teniendo en cuenta la situación comunicativa.
· Aceptar las normas básicas de la comunicación oral y respetar las opiniones ajenas.
· Evitar los usos lingüísticos que suponen cualquier tipo de discriminación.
· Y en líneas generales: perfeccionar la caligrafía, fomentar el uso del diccionario, reducir faltas de ortografía...
Tras la selección del texto adecuado (a veces a una festividad de acuerdo con el calendario, otras a un suceso relacionado con noticias de la actualidad, otras coincidiendo con centros de interés que puedan surgir dentro del grupo y otras, finalmente, a que el profesor lo ha considerado con aliciente para iniciar, desarrollar o complementar algún tema) la metodología empleada ha consistido en, unas veces, realizar un diálogo o comentario sobre el texto seleccionado para luego a colación leerles el texto, y la mayoría de las veces para realizar un dictado o copiado, según corresponda al nivel instrumental del alumno, proceder posteriormente a las correcciones pertinentes y efectuar una lectura en voz alta o baja alternativa y ocasional. Por último y más importante, llevar a cabo una puesta en común en la que mediante preguntas de comprensión lectora iniciar el diálogo, para que el grupo interprete de la forma más fiel posible lo que el autor nos quiere comunicar. Dicho ejercicio nos traerá como consecuencia: comentarios, exposición de ideas divergentes, anécdotas... Es decir, se trata de desarrollar una metodología flexible y abierta que se traduzca en estrategias grupales y participativas que propicien actitudes tanto críticas y de diálogo, como investigadoras y creativas. El contenido de los textos se irá seleccionando teniendo como punto de partida la iniciativa del profesor.
Su temporalización total podría ser aproximadamente de una hora y aquellos textos que por su extensión necesiten más tiempo, pueden desarrollarse en varias sesiones escolares.
La puesta en común puede servir además para la creación de un taller de literatura donde se recojan todas aquellas ideas que reflejen: costumbres, anécdotas, sucesos relevantes, cuentos, poesías populares, canciones, juegos tradicionales, recuerdos de la infancia, experiencias..., o como para que se investigue ocasionalmente, a través de grupos de trabajo, sobre ideas que pueda sugerir el propio texto. En este sentido los diez primeros textos recogen líneas de investigación, así como anécdotas y comentarios de un grupo de alumnas de Educación de Adultos que pueden servir de orientación a los profesionales de la enseñanza que decidan llevar a la práctica esta experiencia educativa.
A este respecto habría que indicar que dependiendo del nivel educativo donde se vaya a llevar a cabo, se tendría muy en cuenta tanto la selección del texto como la metodología, supeditando ambos aspectos a la edad del alumno.
Las actividades académicas que puede generar el texto deben ser eminentemente prácticas y motivadoras, aunque pueden ser de las más variadas, desde la simple corrección de faltas de ortografía o la clasificación de las palabras según su morfología, hasta la organización de una excursión para visitar algún lugar de interés histórico-artístico relacionado con el texto. Amén de charlas-coloquio, dibujos ilustrativos, teatros, juegos...
La evaluación será continua y consistirá en comprobar cómo se van alcanzando los objetivos propuestos.
Para ello el profesor observará en qué medida los alumnos:
· Mejoran su comprensión y expresión oral y escrita.
· Amplían su vocabulario y por tanto su conocimiento.
· Cultivan el gusto por la lectura.
· Desarrollan la imaginación.
· Respetan las normas básicas para dialogar.
· Mejoran la lectura en voz alta para los demás.
· Y en líneas generales captan con mayor facilidad los mensajes que les llegan a través de los medios de comunicación.
Sin embargo también podemos utilizar cuestionarios mediante los cuales podamos contrastar periódicamente la evolución en el rendimiento del alumno.
Las consultas podrían incluir preguntas tales como:
· ¿Te interesaría leer el libro del cual ha sido seleccionado el texto que has copiado?
· ¿Te gustaría conocer la biografía de su autor?
· ¿Serías capaz de escribir la historia de tu familia?
· ¿Qué te gusta más la poesía o la prosa?
· ¿Por qué son importantes los libros?
· Ordena los siguientes elementos cotidianos junto con el libro y clasifícalos, valorando su beneficio, utilidad, estimación e importancia para la civilización: teléfono, coche, televisión, frigorífico, lavadora, ascensor.
· ¿Consideras necesario establecer reglas para facilitar el diálogo en grupo? ¿Cuáles añadirías o sustituirías?
· Selecciona las tres ventajas más importantes que se derivan del conocimiento de saber leer y otras tres del saber escribir.
· ¿Utilizas ahora palabras nuevas que antes no utilizabas? ¿Cuáles?
· ¿Crees que ha mejorado tu caligrafía? ¿Y tu ortografía?
· ¿Cuántos libros hay aproximadamente en tu casa? Nombra algunos de ellos.
· ¿Crees que expresas con exactitud tus opiniones?
· ¿Te crees capacitado para leer en público?
· ¿Tienes dificultad para comprender con facilidad los mensajes que nos quieren transmitir los distintos medios de comunicación?
Por último deseo, si eres un trabajador de la difícil rama de la pedagogía, que estos fragmentos literarios puedan aliviarte o mejorar tu labor educativa en el aula; y tanto si lo eres como si no, que simplemente pases un rato agradable leyéndolos.
En Paradas y marzo, a 18 de 2011
